miércoles, 20 de enero de 2016

Cosa de Psicólogos

Hace 2 años toqué fondo y la psicóloga con la que estuve asistiendo a mis terapias, me hablaba de "Emociones". En aquel momento era incapaz de abrir la boca para expresarle cómo me sentía. 

En todas mi relaciones personales, laborales o de pareja,  cuando me preguntaban, ¿qué piensas? ¿cómo te sientes? ¿qué te pasa?, me limitaba a subir y encoger los hombros, llorar, sonrojarme y avergonzarme. Me faltaba "ALGO" en mi programa mental QUE NO ME PERMITÍA encontrar el PROGRAMA de "GESTIÓN DE LAS EMOCIONES".

Mi psicóloga tardó más de 3 meses en conseguir que expresara "cómo me sentía" y fue ella, Carmen García, quién despertó mi curiosidad por el "fascinante mundo de las emociones"

Me explicó la manera que tenemos de interpretar las cosas y me puso como ejemplo, la lámpara de su despacho. Me dijo : "esto"( señalando la lámpara),  es un fríe huevos. Si desde siempre te han dicho que esta  lámpara es un fríe huevos, defenderás hasta la muerte que es, "un fríe huevos". A esto Carmen, le añadió la aplicación del método de Albert Ellis,  creador de la Terapia Racional Emotiva (TRE). Carmen me entregó
un folio con las 11 creencias irracionales y cuando ahora la reviso, me asombra ver que todas, excepto a una de ellas, le puse un  9 ó 10, siendo 10, que "yo", estaba completamente de acuerdo con esa CREENCIA. Madre mía¡¡¡¡ y ¡yo que iba de racional por la vida y buscando siempre "mi verdad" y "mi razón"!

Por si fuera poco, Carmen me explicaba que nuestra vida es como una "Obra de teatro" donde los personajes, actores y actrices, iban pasando por los diferentes papeles de la obra, y actuando en cada escena. Y qué razón tenía Carmen, aunque yo en ese momento no estaba de acuerdo con lo que ella me decía, porque  "yo", estaba segura que lo que estaba ocurriendo en mi vida, era real, real, y que todo lo que sucedía en aquel entonces en mi vida, me venía de fuera. No podía creerme, que mi escenario, ese que "yo" estaba viviendo en ese momento, lo hubiera "creado yo".

Que va¡¡¡¡ imposible¡¡¡.

Cuando eres madre, quieres lo mejor para tu hijo, lo educas para que sea un ser humano bueno, una persona  feliz en la vida, que no esté deprimido. Como  madre, para poder enseñar a mis hijos a gestionar sus emociones, primero tenía que hacerlo yo, y para ello tenía que instaurar en el disco duro de mi cerebro, el "programa de gestión de emociones".

 Ahora soy consciente de que no tenía que instalar ningún programa, pues las emociones no atienden a programas racionales, si no  a la manera en la que interpretas tu mundo y eso depende de tus creencias, valores, certezas, juicios…etc. Las creencias tienen diferente peso, no todas son iguales y lo que las diferencia es la EMOCIÓN que te genera. Tus creencias son las que te impulsan a hacer lo que haces en tu vida y a tomar uno u otro personaje de TU OBRA DE TEATRO, del escenario que estás viviendo.

Dos personas ante la misma situación tomarán decisiones diametralmente opuestas y se sentirán de manera diferente y eso es así, porque nuestras vidas están regidas por unos programas inconscientes, heredados de nuestro inconsciente familiar y colectivo, que se expresan en nuestro inconsciente individual y se manifiesta en nuestras vidas en forma de circunstancias, situaciones, relaciones personales, síntomas o enfermedad.  Y la emoción que hay en cada persona ante la misma situación o acontecimiento es también diferente. (Definición desde al Bioneuroemoción).

Gracias Carmen, tú eras parte del escenario de mi vida en aquel momento y te tocaba hacer el papel de una GRAN Psicóloga, detrás de una GRAN PERSONA.

Gracias

2 comentarios:

  1. Ay, mi Motnsita! Qué buenos tiempos... Me encantó trabajar contigo, eres inteligente y magnífica, y no tenías ni idea! Hay cosas en la vida que nos lastran sin que siquiera lo sospechemos. Una vez fuera el lastre, has hecho lo que estaba previsto que harías, volar. Un montón de besos.

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